Uno de los principales problemas fiscales que enfrenta una persona que apenas se incorpora al mundo laboral, y que puede ser arrastrado por años si no se informa a tiempo, es el de la expedición de facturas.

Esto sucede por nuestra poca o incluso nula formación en temas fiscales. Pero también se debe a la cantidad de trabas que estos procedimientos suelen tener y que, en lugar de hacer la tarea más fácil para los contribuyentes, termina creando frustración y temor de no estar cumpliendo correctamente con las obligaciones de este tipo.

Pero afortunadamente ya existen otras alternativas para poder sobrellevar este caos, que suele llevarnos mucho tiempo mientras apenas aprendemos de qué se trata todo este asunto. No te pierdas estos tips que te permitirán expedir las facturas que necesites ¡sin mayores complicaciones!

En primer lugar, qué son y para qué te sirven las facturas

Las facturas son documentos mercantiles que recopilan la información generada al realizar el proceso de compra-venta de algún producto o servicio. Básicamente sirven para demostrar que se efectuó dicho proceso.

Estas varían dependiendo de los productos o servicios que se vendan, así como de las condiciones de compra. Entre sus datos más importantes, están los relacionados con el comprador y el vendedor, del producto y sus impuestos.

Tus obligaciones, según el régimen al que te inscribas

Otro punto que seguro te facilitará la realización de tus facturas, es conocer qué tipo de facturas debes emitir, por qué razón y en qué fechas (de acuerdo al régimen en que te encuentres).

Puede ser sólo por honorarios, si te dedicas por completo a hacer trabajos independientes tipo “freelance”. O si tienes un trabajo formal en una compañía, podrías tener el régimen asalariado.

Para aclarar de forma puntual estos aspectos, te recomendamos hacer una cita en los módulos del SAT e informarte de manera precisa sobre tus obligaciones. Esta orientación es totalmente gratuita y responderán todas tus dudas al respecto, pero tampoco descartes la opción de confiarle estos temas a un experto o a un software que haga el trabajo por ti.

Explora herramientas que simplifiquen el proceso de facturación

Como mencionamos, por fortuna cada vez son más las herramientas que te pueden ayudar a cumplir con el requisito de la facturación. Uno de estos casos son las aplicaciones, que te proporcionan practicidad y eficiencia para realizar facturas, como muchas otras interfaces de este tipo con las que ya estamos familiarizados.

Además, estas aplicaciones te permiten administrar de forma sencilla la información que ingreses sobre los servicios y productos que factures, e inclusive guardarla para futuros servicios. Y, por supuesto, brindan la facilidad de realizar estos movimientos desde tu teléfono móvil o tablet, para mayor comodidad y agilidad.

Valida que tus facturas sean correctas

¡Atención a este punto! Pues esta es una norma del propio SAT: es tu obligación validar que cada factura que emitas o recibas, sea correcta en cuanto a su información legal. Asimismo, se pide resguardar estos comprobantes fiscales por al menos 5 años para cualquier aclaración.

¿Estás listo para llevar tu propio manejo de contabilidad? Recuerda que todos estos puntos te ayudarán a no tener mayores problemas al respecto y, a la vez, podrás satisfacer mejor las necesidades de tus clientes.